Al otro lado del puente hay una voz dulce y desasosegada, pero no sé bien que miedos la mecen…
al otro lado del puente hay un laberinto, sin minotauros pero sin hilo del que tirar, pero ¿acaso un laberinto no es también un camino?
al otro lado del puente hay un abrazo múltiple de incertidumbres, pero sin dudas no hay decisiones, sin decisiones no hay vida…
al otro lado del puente hay un brillo arrinconado que hacer deslumbrar de nuevo, una sonrisa a la que resucitar a besos, una piel anhelada y un sueño que componer, un abrazo tibio y una esperanza voraz…
al otro lado del puente hay un andén de espera y ahí, me he sentado a escribir esto y llorar aquello…
4 comentarios:
Qué afortunada la persona que, andando su propio camino, cruce un puente y te encuentre a ti esperando en el otro lada.
Bon dia Jitu, un petonet.
Al otro lado del puente hay un mar de oportunidades, asi q a por ellas.
Un abrazo
¿AL otro lado del puente? ¿Te refieres a la barandilla que se intuye tras la niebla? Uy, ya no, ya sólo hay niebla...
El último anónimo, Vanlat desde el curro.
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