jueves, 5 de noviembre de 2009

Recuerde, recuerden...


Recuerden, recuerden, el cinco de noviembre. Conspiración, pólvora y traición. No veo la demora y siempre es la hora para evocarla sin dilación.

"¡Buenos días! Permitid que, primero, me disculpe por la interrupción. Yo, como muchos de ustedes, aprecio la comodidad de la rutina diaria, la seguridad de lo familiar, la tranquilidad de la monotonía. A mí, me gusta tanto como a vosotros. Pero con el espíritu de conmemorar los importantes acontecimientos del pasado , he pensado que podríamos celebrar este cinco de noviembre tomándonos cinco minutos de nuestra ajetreada vida para sentarnos y charlar un poco. Hay, claro está, personas que no quieren que hablemos.

¿Por qué? Porque mientras puedan utilizarán la fuerza ¿Para qué el diálogo? Sin embargo, las palabras siempre conservarán su poder, las palabras hacen posible que algo tome significado y, si se escuchan, enuncian la verdad.

Y la verdad es que algo va muy mal, ¿no? Antes tenías libertad para objetar, para pensar y decir lo que pensabas. Ahora, tienes censores y sistemas de vigilancia que nos coartan para que nos conformemos y nos convirtamos en sumisos. ¿Cómo ésto ha podido ocurrir? ¿Quién es el culpable? Bueno, ciertamente, unos son más responsables que otros. Y tendrán que rendir cuentas. Pero, si estás buscando un culpable, sólo tienen que mirarse al espejo. ¿Por qué lo hiciste?, Porque tenías miedo ¿Y quién no? Guerras, terror, enfermedades... Había una plaga de problemas que conspiraron para corromper vuestros sentidos y sorberos el sentido común.

Hace más de cuatrocientos años un gran ciudadano deseó que el cinco de noviembre quedara grabado en nuestra memoria. Su esperanza era hacer recordar al mundo que justicia, igualdad y libertad son algo más que palabras; son metas alcanzables. Así que si no abren los ojos, entonces os sugiero que permitáis que el cinco de noviembre pase sin pena ni gloria. Pero si ven lo que yo veo, si sienten lo que yo siento y si persiguen lo que yo persigo, entonces, les pido que se unan a mí , dentro de un año. Y juntos, les haremos vivir un cinco de noviembre que jamás, jamás nadie olvidará.


(adaptado del cómic "V de Vendetta" de Alan Moore y David Lloyd)

No hay comentarios: