viernes, 26 de octubre de 2007

Sin palabras

Una especie de felicidad inesperada en el ambiente se convertía en una bruma invisible. La noche había convertido las calles en acogedores pasillos mullidos de alfombras imaginarias y por ellos paseaban en busca de una excusa, de una palabra intencionadamente descuidada.

Se besaban a cada momento, pero se buscaban más allá de los besos. Ambos. Sin saber lo recíproco de la pregunta.

Hay quien sostiene que los suspiros, las caricias, los besos y las miradas hablan mucho más que las palabras. A veces. Porque otras veces, pese a todas esas señales, siempre hacen falta algunas palabras. O una, simplemente.

Esta vez fueron dos, o una repetida. Una pregunta y una respuesta.

- ¿Sí?
- Sí.

Y al cabo, dejaron de hablar. Es decir, dejaron las palabras. Entonces sí se hablaron a base de suspiros, de caricias, de besos, de miradas. Se hablaron hasta quedarse sin palabras, sin aliento y sin excusas para odiar a la suerte.

Una especie de felicidad irresistible en el ambiente les acunaba cuando se durmieron abrazados. Sin palabras innecesarias. Sin palabras al fin y al cabo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

:)
Um besito!

Princess Valium dijo...

Me alegro mucho :) Ya lo sabes, ¿verdad?
Besitos i petonets

Anónimo dijo...

Bien por vosotros!!!!

Jo, qué bonito es el amor... y estar enamorado!!!!

Besitos naran!