martes, 5 de enero de 2010

Feliz Ilusión


La de hoy es la noche de la ilusión. Es algo tremendo. Tan tremendo que se nos escapa su verdadera dimensión. Yo, que intento no dejar de ser un niño, apenas alcanzo a comprenderlo bien. Los que de verdad saben lo que significa esto son los niños. Qué suerte tienen. Y qué mezquinos seríamos si no los ayudáramos a conservar esa ilusión que, después, ya la vida se encargará de rebajarles.

Dicen los tópicos eso de que “una imagen vale más que mil palabras” y que “hay cosas que no se pueden definir con palabras”. Totalmente cierto si no, explíquenme con palabras lo que dice una imagen como las miles que se pueden ver esta noche: la cara de un niño al ver a los Reyes Magos.

Además es una ilusión digamos justa. Porque ellos creen que esta noche, por el hecho de ser niños, alguien les traerá regalos a casa pero siempre dependiendo de lo buenos que hayan sido durante el año. Es tan perfecto que debería ser verdad. Y como hoy es la noche de la ilusión, vamos a pensar que así es.

Así mañana al despertarse Marian tendría la almohada repleta de versos de colores, Laura encontraría un trabajo como el que merece (igual que Mar e Isabel), Iratxe conseguiría este año los dos aprobados más importantes de su vida, Lucía seguiría estando y siendo buena y más que eso, Jesús y sus “chicos” conseguirían el ascenso de categoría, Rodri y Esther seguirían viendo crecer a Alejandro y Adrián, Ainhoa a Aina, Roberto y Elena tendrán un niño precioso igual que Javier y María, igual que Ana (¿o es Asunción?), Álvaro vería publicada una de las mejores novelas que se pueda leer: la suya, Guillermo seguiría siendo como es (lo cual haría felices a todos los que le conocemos y eso... eso es lo que le hace feliz a él), Vanesa notaría cada mañana el azúcar en los labios, Diana se encontraría con Amelie a cada rato y Penélope tropezaría con estrellas de mar en todas las calles, y así con toda la gente buena… (perdón por las ausencias y olvidos).

¿Y yo? Yo seguiría escribiendo este blog, contando cuentos de vez en cuando y teniendo, al menos, tantos amigos como hasta ahora.

Feliz noche de la ilusión

(Nota: Este año -y van cuatro- tampoco puedo ir a la Cabalgata. Háganlo ustedes por mí y, si se acuerdan, díganle a Baltasar que he sido bastante bueno… Gracias)

6 comentarios:

Vanlat dijo...

Mi rey también es Baltasar!

Vanesa dijo...

Hoy es el día en el que todos volvemos a ser niños... el mejor regalo... nunca hay q perder la ilusión!!!

Mar dijo...

A ver si Baltasar, que también es el mío, te escucha...

Los amigos, por si no, seguimos por aquí...

Álvaro dijo...

Mmmm... Creo que he oído algo. (Espero que esto disculpe que siendo las horas que son, me halle aún tan despabilado.)
Magnífica entrada, como siempre.
Qué suerte tengo de haberte conocido, Galetti.

Anónimo dijo...

Pues sí, Ana (o Asunción) tendrá su niño, el mejor regalo de todos, y al que llevará a escuchar tus cuentos. Espero que sea en la próxima feria del libro, que hay que educarlo bien desde el principio.
Estoy segura de que los Reyes también se habrán portado bien contigo. Un abrazo. Amaya

Anónimo dijo...

Gracias por los versos que aparecieron debajo de mi almohada. Espero que te gustaran los bombones.
Besotes