miércoles, 26 de noviembre de 2008

Amigos, hermanos

Justo esta tarde he leído esa frase ya clásica de que "los amigos son los que, cuando las cosas van bien, les llamas y vienen. Y cuando las cosas van mal vienen solitos"

Y me ha recordado a otra parecida que escribí en un e-mail hace poco:

Los amigos son los que sabes que, si les llamas, vendrán a tu casa a tomar café contigo.

Pero los verdaderos amigos (yo los llamo hermanos) son los que sabes que, sin que haga falta llamarles, puedes ir a su casa porque siempre te abrirán para invitarte a que tomes un café.

A mí no me gusta el café ni tengo casa para invitar a mis amigos pero sí que tengo mucha gente con la que cuento. Hay muchos teléfonos en mi agenda que, aunque no marque a menudo, sé que el día en que me haga falta alguien los descolgará loco de ganas de echarme una mano.

Y también tengo suerte, mucha suerte. Porque, además, siempre a mi lado hay un puñado de hermanos de los que me siento orgulloso y, cada día, trabajo para que ellos se sientan orgullosos de mí.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Café, té, agua o simplememte un paseo mirando el mar... ;)
Gracias, por todo, siempre.
Fdo: la orgullosa socia nº 20 de esta maravillosa asociación.

Se te quiere, pomelin! (jejeje)
Un besote!

Anónimo dijo...

Creo que es una estupenda definición. A pocos lugares puede ir una con la tranquilidad de que le darán un café -o lo que se tercie- sin avisar. Por mi parte, me encantán los cafés inesperados.